Todos estamos ya familiarizados con las normas sobre el uso de nuestro más querido apéndice, durante los torneos de ajedrez, el móvil. Que no se puede introducir en la sala de juego, que el/los árbitros se lo pasan por el forro y te dejan tenerlo pero apagado, que unos dicen que tiene que estar a la vista, que otros que no quieren verlo, pero que si lo llevas lo dejes guardado en una mochila y no salgas con él, otros te hacen meterlo en una caja junto con un montón, otros en un sobre sellado y así podría seguir... ¿Qué mierda esperan los árbitros si ni ellos mandan siempre lo mismo? Pero bueno, eso es otro post.
¿Qué pasa si te suena un móvil que no es tuyo? A ver, yo estoy plácidamente jugando mi torneo, mi amigo del alma querido termina, se va, y para no ir cargado me deja su mochila hasta que termino. ¡Sorpresa! el móvil dentro, encendido y suena ¿Debo perder la partida? ¿Qué dice el reglamento? Y visto que eso importa poco ¿Qué haríais como árbitros?
debes de perder, tu conducta de guardar, no guardar, amigo o no amigo es tu responsabilidad y no la del árbitro.
ResponderEliminarEl tema de los moviles es muy delicado. ¿Cuál es el problema de que suene un móvil? Molestar al contrario o suponer que puede estar haciendo trampas. Supongo que la FIDE lo que pretende es que no se moleste al contrario, porque si lo que pretende es evitar las trampas con eso no se consigue. A mi por ejemplo si es por molestar, me molesta mucho más el típico jugador que se pone a jugar con el peoncito capturado durante toda la partida.
ResponderEliminarSobre la pregunta del blog, palma el dueño del movil, si le encuentras claro.
Sobre las trampas, yo entre las docenas de comentarios que he visto en facebook, foros y demás, sobre la mejor manera de controlarlas, el comentario más acertado es el de Juan Manuel Bellon, "inhibidores de frecuencia en el baño", sin duda la zona mas acertada para colocarlos.
Recuerdo un torneo en el que participé en el que un amigo sospechaba que su rival le estaba haciendo trampas porque se levantaba continuamente. Informó al árbitro, y el árbitro comprobo que el jugador se levanto en un momento dado y fue al baño.
Al salir, le pidieron que entregara el movil, y como estaba apagado, ahi quedó la cosa. Realmente no se podia hacer otra cosa.
Despues de la partida que perdió mi amigo, hubo mas que palabras, pero el caso es que al rato mi amigo le pilló con un segundo movil (al parecer llevaba los dos durante la partida) . Se quejó, y el arbitro le dijo que la partida habia finalizado, la planilla estaba firmada, y que no habia reclamacion posible. Mi amigo insistió, en que el arbitro le habia solicitado que entregara el móvil y solo entrego uno de los dos, lo cuál era motivo no solo para perder la partida sino para ser descalificado. Además le preguntaba al arbitro que cual era el sentido que un jugador se presente en una partida con dos telefonos moviles. Dado que el árbitro era muy bueno, habria que ver la versión del otro jugador y la del arbitro pero el tema es peliagudo. ¿se puede dar la partida a un jugador una vez finalizada la partida si lleva dos moviles y que cuando se le ha pedido que entregara el movil durante la artida, solo ha entregado uno?
Yo creo que hay mucha psicosis con el tema de las posibles trampas que hoy en dia se pueden hacer en un torneo de ajedrez. Los jugadores pasean, van al baño (yo voy mucho), van a ver otras partidas, desaparecen, y hay jugadores que en cuanto en algo así se mosquean. Pero al mismo tiempo la posibilidad de hacer trampas es una realidad, y sí se deberían poner medios que las eviten al menos en torneos importantes.
Cuánto se aleja a veces la regla del espíritu... El espíritu es que no haya ayudas ilegales. Dos jugadores charlan bajito en la sala mientras miran la posición de uno de ellos. ¿El árbitro?: ciego, sordo y paralítico. Si alguien protesta dirá que hay que demostrar que le dijo algo... Sin embargo suena el móvil y el árbitro salta raudo y veloz porque el propietario seguro que ha recibido un soplo. La FIDE regula para profesionales ignorando a los aficionados. Con lo fácil que es permitir que las bases puedan poner que el jugador será amonestado la primera vez que suene... Así habría bases más rigurosas para profesionales y más normales para aficionados... Por eso dije que jamás reclamaré contra un móvil.
ResponderEliminarComo árbitro entiendo que no puedes poner tu partida. Se sanciona introducir aparatos electrónicos en el recinto de juego y tu no lo has hecho así que fácilmente prospera un recurso. Yo no sancionó.
ResponderEliminarSi te haces cargo de la mochila ,es de todo lo que lleva dentro.La pregunta es que pasa si aparece un policia y dentro de la mochila hay medio kilo de cocaina , ¿ eres tu el responsable?
ResponderEliminarSí mi amigo me deja la mochila y suena el móvil, yo digo que la mochila no es mía y que no sé quien la ha dejado ahí. No te fastidias.
ResponderEliminarHay escritores de blogs que hablan de las reglas pero no ponen ni una palabra de las susodichas. Dicen que todos están familiarizados con ellas. Para que comprobemos el nivel de familiaridad te sueltan que "los móviles no se pueden introducir en la sala de juego" (no hace distinciones, y añade que los árbitros son algo así como una marabunta confusa, lo que podría ser verdad...).
ResponderEliminarVeamos lo que dicen las reglas: "11.3.2.1 Durante la partida está prohibido que un jugador tenga cualquier dispositivo electrónico NO APROBADO ESPECÍFICAMENTE POR EL ÁRBITRO en la sala de juego. SIN EMBARGO, las bases del torneo pueden permitir que tales dispositivos se almacenen en la bolsa de los jugadores, siempre y cuando el dispositivo esté completamente apagado. Esta bolsa debe colocarse en el lugar designado por el árbitro. Ambos jugadores tienen prohibido utilizar esta bolsa sin el permiso del árbitro.
11.3.2.2 Si es evidente que un jugador lleva encima un dispositivo de este tipo dentro del recinto de juego, perderá la partida. El adversario ganará. Las bases de un torneo pueden especificar una sanción diferente, menos grave.".
Estoy muy de acuerdo con Ricardo Montecatine en su comentario antiparanoia. Sonrío y simpatizo con el comentario de Lobato.
Jose comenta una propuesta de Bellón sobre la instalación de "inhibidores de frecuencia en el baño". Mala idea. El inhibidor de frecuencia es ilegal en muchos países, y no es algo que pueda hacerse sin un permiso especial de la Autoridad pública. Es el típico error del que juzga en base a un horizonte estrecho... Cada día más, la gente llevará encima elementos electrónicos (de comunicación) de carácter sanitario, médico, legal, etc. El universo no debe adaptarse al ajedrez, sino el ajedrez al universo, o ir a la basura (el ajedrez, claro).
Hay ciertos árbitros que sólo saben encadenar las letras, pero no comprenden la lectura, hay ciertos árbitros que contestan, únicamente, a la parte que se dice claramente que es para otro artículo, hay ciertos árbitros que citan a los demás, pero no se mojan y dan su experta opinión, hay ciertos árbitros...
ResponderEliminarEn fin, seguiré esperando a ver si algún árbitro me dice, más allá de toda duda, lo que debe hacerse.
Hay ciertos árbitros...
ResponderEliminar¡Ah! ¿No te he contestado la cuestión? Juraría que este caso o muy similar ya se había comentado alguna vez. Voy a ello en esta tarde de siesta en los Campeonatos de Salobreña:
Las reglas hablan de quién tiene el dispositivo. Habla de tenencia. Cuando suena un móvil un árbitro no puede ni debe entrar en el título, en el titular del aparato. Si es suyo o es de otro, o si lo tiene en condominio o prestado. Esa es una cuestión en la que no cabe entrar en una sala de torneo.
Lo que importa es quién TIENE el móvil y, por consiguiente, quién tiene la responsabilidad sobre el "bicho". Cuando el jugador se hizo cargo de la mochila, se hizo cargo de toda ella. ¿No crees? (¿No se llamaba esto responsabilidad aquiliana?).
Como árbitro voy y le pregunto si tiene la mochila y, con ella, el móvil que suena. ¿Tienes la mochila y tienes el móvil? ¿Si? ¡Pierdes! Tiene mala pata. No comparto la regla. Pero cuando se hizo cargo de la mochila debió desplegar una mínima diligencia...
En esta tarde de siesta me viene lánguidamente a la cabeza una imagen: Sueño que juegas una partida contra tu peor enemigo. Tu rival se hizo cargo de una gruesa bolsa... Ves como la cuelga del respaldo de su silla. Un rato después sale escandalosamente un riiiiiinnnnggg campanuda de la bolsa; unos segundos después, el timbre de un móvil; a continuación, se amontonan nuevos timbres y melodías de otros móviles. Viene el árbitro. Tu rival le dice: "Lo siento, me han dejado la bolsa pero nada es mío."
ResponderEliminarNo busquéis más soluciones.
ResponderEliminarComo arbitro, me adueño del móvil y "su dueño", ya vendrá a buscarlo, entonces es el momento de actuar y si el dueño no viene.......ya tengo móvil nuevo, pero tranquilos, que el dueño siempre aparece.