A falta de una ronda nos encontramos, con un tiempo endemoniado donde reina la lluvia y el frio, en tierra de Lucena.
La participación está, a mi entender, siendo ejemplar, sin que ningún altercado merezca ser mencionado, bueno…, un par de jugadores perdieron una de las rondas mañaneras, la quinta, por quedarse dormidos aún a pesar de los intentos de despertarlos por parte de sus amigos.
El hotel es, a términos generales, un buen hotel apartado del pueblo lo que favorece, se supone, la concentración y recogimiento. ¡Vivan las concentraciones!
Siendo algo más serios, la verdad es que hotel está realmente bien, las habitaciones estupendas, el buffet, aunque no abunda en variedad es bastante completo y las comidas están bien de calidad, pero lo que realmente nos importa es la sala de juego, y es de las más espaciosas que he visto en los últimos años, aunque también de las más frías en las que he jugado, ¡Es un congelador!
Pero bueno, centrémoslo en el aspecto técnico del juego. A falta de una ronda Marcos Camacho (Chiqui) va primero, en solitario, con 7 de 8 posibles con un ajedrez muy serio y de nivel estable durante todas las rondas ¿Tendrá que ver, que es un chico “bueno” y duerme, descansa y no hace excesos? Paolo Ladrón De Guevara ha sacado unas tablas en extremis y se descuelga en medio punto de la cabeza de torneo.
Sala de juego |
No quiero terminar el post, sin haceros una pregunta que me surgió anoche, mientras “Josemi” nos desplumaba al poker a más de uno, ¿Los becados, MENORES, son responsabilidad de la FADA? ¿De no serlo, tienen que ir con un responsable? ¿De serlo, quién se encarga de controlar que no beban o salgan al par de los mayores? ¿Deben becarse menores, a torneos dónde puede no existir un suficiente control?
Otra cosa no sé. Pero los gaditanos hemos sido los reyes del poker en Lucena.
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